domingo, 27 de noviembre de 2011

¿Hace falta que te diga que me muero por tener algo contigo?


Ya no puedo acercarme a tu boca,

sin deseártela de una manera loca.

viernes, 25 de noviembre de 2011

Podría mirar tu foto durante horas

Podría pasarme mirando esa foto horas, podría mirarla de lado, de frente, de lejos, de cerca. Podría mirarla desde el ángulo 45º, desde el 90º... o 100º. La podría mirar con odio, con amor, con ternura, con amistad o con rencor. La podría mirar con los ojos cerrados porque ya me la sabría de memoria... Conocería su brillo, su color, su esplendor. Conocería la forma de la mirada, de nuestra mirada. Conocería nuestros sentimientos, la alegría de ese esperando momento o la pena de ese angustiado adiós. Conocería los secretos del alma, las pequeñas sonrisas o el inquietante efecto de la gravedad. Si, podría mirar la foto y seguir viendo la misma persona que un día vi, esa persona trasparente, con corazón bondadoso, con actitud caprichosa, con caricias amorosas, con pájaros en la cabeza. Aún sentiría los apretones de nuestros abrazos, el silencio de las palabras, el efecto de los besos. Sentiría los recuerdos, los despistes, las fechas, las palabras que las recuerdan. Sentiría la necesidad de saber de ti, aunque la foto ya me lo trasmitiría, lo sentiría todo. ¿Y qué decir? Guardó cada una de nuestras fotos, de nuestros recuerdos, de nuestras palabras, de nuestras ironías, de nuestros mensajes, en el fondo de mi corazón. No me las pidas, no te las daré. No me ruegues porque no te escucharé. No permitas porque yo tampoco te lo permitiré. No me olvides porque yo no te olvidaré. No me odies porque sabes que amarás, que me amarás por encima de las mentiras, de las falsas palabras, de las hipotéticas ilusiones, de la cruel realidad. Si quieres las fotos y los recuerdos, ábreme la caja del corazón que guarda cada sensación, cada sonrisa y cada lágrima. Aunque ya te será difícil, he tirado la llave al mar, he tirado las nubes, he tirado la arena, he tirado la lava de los volcanes, he tirado la ventisca. Lo he tirado todo. Y aún así la llave sigue brillando en el fondo porque no es una llave normal, es la llave de nuestro amor. Quién un día abrió nuestros corazones y quién un día puso fin a nuestras vivencias juntas. No te guardaré como un recuerdo más porque tú ya no eres un recuerdo, eres una foto, mi foto, la que podría mirar durante horas, de lado, de frente [...]

lunes, 14 de noviembre de 2011

Su peor despedida

Cuando una simple conversación hace que todas las cosas que había conseguido olvidar vuelvan de repente a aparecer. Había decidido olvidarlo por completo y todo iba perfecto, aunque ella seguía echándole de menos, y pensaba en él pero ya era diferente. Fue una decisión difícil, pero la distancia pudo con todo y prefirió olvidarlo a seguir con esas rayadas que no la dejaban concentrarse y con todas esas lágrimas derrochadas al escuchar las canciones que le recordaban a él. Y que aún le siguen recordando. Y volvió. De la nada. Una conversación bastó para que ella volviera a pensar en ese verano, en esos dos meses, pocos pero intensos. Dos meses que jamás olvidará por mucho que pase el tiempo. Prueba de ello son ya los 16 meses que hace de aquello, los 14 meses sin verse. Los intentos de poder escapar un día a su ciudad para verle. Y ella seguía recordando cada minuto que pasó junto a él, todo lo que pasó, cómo fue su primer beso, el lugar, el cielo, las estrellas, sus palabras. Tampoco olvidará nunca el último beso, con lágrimas en los ojos. Fue su peor despedida sin duda. De hecho es su peor despedida.



- Echo de menos todo aquello y todas esas cosas.
Rápidamente ella sonsaca que ese "todas esas cosas" va por ella... Pero surgen las dudas. ¿Y si no va por mi?- se pregunta. Él se despide con un tímido "te quiero", y con un "tenéis que venir". Ella le dice que hablarían de eso otro día y se despide. Con sutileza él le dice que la quiere más, y comienza el juego de a ver quien se quiere más. Lo dejan en tablas.


Y volviendo al principio... ella son todo dudas. Otra noche escuchando sus canciones. Las que le recuerdan a él. Las que él le dijo que le recordaban a ella. Imaginación al poder, se imagina diciendo la letra de una canción, SU canción, junto a él.
-Cause I'm into deep...
-And I'm trying to keep...
-Up above in my head...
-Instead of going under.
Y se ríen, y se miran a los ojos. Y él le pone esa carita tan especial. Esa carita que la ve y piensa "me lo como, ¿por qué es tan mono?". Y efectivamente se lo come... pero a besos.


Pero volviendo a la realidad, son cosas que ella sabe que probablemente no pasarán, al menos en un futuro cercano. Y mientras seguirá pensando si seguir rayándose por él, u olvidarle definitivamente, aunque sabe perfectamente que será muy difícil, porque lo quiere. Y mucho.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Pues... Te besaría

- ¿Y si pudieras decirme todo lo que sientes por mí en cinco segundos? 
- Pues... Te besaría.
- ¿Me besarías?
- Sí.
- ¿Por qué?
- Porque en cinco segundos jamás podría decirte todo lo que siento, en cinco segundos ni siquiera podrías imaginarlo. Pero con un beso te diría todo lo que jamás sería capaz de decirte con palabras, en un beso escucharías todos mis silencios y pillarías mis indirectas e ironías. Y quizás, (sólo quizás) en ese beso sentirías lo que siento.

sábado, 5 de noviembre de 2011

I don't love you ...I'm sorry

Ella, que un día dibujó corazones, ahora debe romperlos. Ella, que escribía historias donde las protagonistas eran unas mariposas que bailaban con el mar, ahora sólo puede escribir historias de corazones rotos. Ella, que saltaba de ilusión cada vez que le veía, ahora se limita a agachar la cabeza al verle pasar. Ella, que antes vivía feliz rodeada de sonrisas, ahora vive en el planeta Tristeza. Y dejó de creer en el amor, dejó de creer en él, dejó de creer en sí misma, dejó de creer en ese 'ellos' que tanto deseaba. Sabe que el Sol puede salir sin él, que puede sonreír sin que esté cerca, que puede vivir sin recordarle a cada instante... Ella lo sabe, el problema es que no puede aceptarlo. 

viernes, 4 de noviembre de 2011

You hurt me but I still love you

Hace ya tiempo que te estoy buscando. Una mañana me desperté y me sorprendió la falta del tacto de tus labios sobre mi pelo; que no me susurrases, como en cada mañana, uno de tus 'te quiero'; la ausencia de tus brazos rodeando mi cintura, atrapándome en la única cárcel en la que me hubiese gustado estar. Y te busqué; te busqué debajo de cada una de mis ilusiones; en cada uno de mis sueños, y cada una de mis pesadillas; en cada lágrima, tanto de tristeza como de alegría; en cada hora, cada minuto y cada segundo; en cada ola que se rompía en la orilla de aquel mar, el mismo que un día contemplamos juntos; en cada alegría y en cada decepción. No aparecías. Y, después de tanto buscar, se me ocurrió preguntar por ti en mi corazón. He de admitir que no me sorprendí demasiado al ver que estaba roto, al igual que el 'Tú y Yo' que un día dibujamos con nubes para tatuar nuestro cielo.