domingo, 29 de abril de 2012

Pero los días pasaban y ya no sabías vivir de otra manera

"Se creen sabios porque han juntado un montón de libros y se los han comido. Me da risa, porque en realidad son buenos muchachos y viven convencidos de que lo que estudian y lo que hacen son cosas muy difíciles y profundas. En el circo es igual, y entre nosotros es igual. La gente se figura que algunas cosas son el colmo de la dificultad, y por eso aplauden a los trapecistas, o a mí. Yo no sé qué se imaginan, que uno se está haciendo pedazos para tocar bien, o que el trapecista se rompe los tendones cada vez que da un salto. En realidad las cosas verdaderamente difíciles son otras tan distintas, todo lo que la gente cree poder hacer a cada momento. Mirar, por ejemplo, o comprender a un perro o a un gato. Esas son las dificultades, las grandes dificultades."


Julio Cortázar

lunes, 16 de abril de 2012

El día en que decidió llorar

“Siempre escucho la misma frase: se supone (y con esto ya empieza mal, pues son sólo supuestos) que una relación se basa en confianza y apoyo. ¿Y saben qué? No puede haber supuesto más ido de la realidad, una relación significa embarrarse hasta el fondo en dudas, apretar su mano y a veces sentir que no es real, disfrutarlo cuando se pueda y cuando no, sufrirlo. Amar no sólo se trata de cosas buenas, y he ahí el punto… ¿Estamos dispuestos a pasar las cosas malas?”

viernes, 13 de abril de 2012

Su amor era mi droga

“Me hizo sentir como una auténtica yonqui, con la misma dependencia que los drogadictos necesitan cada día su droga. Había veces que ni dormía, sólo esperaba a que él apareciera, con su paz y su media sonrisa escondida entre las notas de Jazz que navegaban por sus oídos. Y es que llegaba, me miraba, me atrapaba, me seducía, y por último me hacía el amor en la cama con Marvin y Getz como compañía. Las ansias de sentirle ni me dejaban vivir, y el compás de mi corazón lo acabaron marcando los surcos del vinilo que cada noche descansaba sobre el tocadiscos. Había mañanas que parpadeaba infinitas veces y después, me apoyaba sobre su pecho para comprobar que era verdad, que estaba allí, conmigo. Nos emborrachábamos de amor, alma y vida, y vivíamos de impulsos recién salidos del corazón. Compusimos melodías al compás de los latidos e incluso llegamos a bailar entre el humo de cigarrillos apagados. Hoy contemplo la luna que cegó mi alma, pero mis rodillas, seguirán bailando un swing cada vez que sepa que él, va a aparecer por la esquina. Su amor era mi droga.”

jueves, 12 de abril de 2012

Ella no es perfecta. Tú tampoco lo eres.

“Ella no es perfecta. Tú tampoco lo eres, y vosotros dos nunca seréis perfectos. Pero si ella puede hacerte reír al menos una vez, te hace pensar dos veces, si admite ser humana y cometer errores, no la dejes ir y dale lo mejor de ti. Ella no va a recitarte poesía, no está pensando en ti en todo momento, pero te dará una parte de ella que sabe que podrías romper. No la lastimes, no la cambies, y no esperes de ella más de lo que puede darte. No analices. Sonríe cuando te haga feliz, grita cuando te haga enojar y extráñala cuando no esté. Ama con todo tu ser cuando recibas su amor. Porque no existen las chicas perfectas, pero siempre habrá una chica que es perfecta para ti.

Bob Marley

miércoles, 11 de abril de 2012

Siempre estarás tú

Dicen que lo que uno desea demasiado nunca llega, y que cuanto más te preparas para algo más se aleja de ti. Esta teoría se aplica también en sentido inverso: si ruegas con todo tu corazón que algo no pase, puedes tener la certeza de que no tardará en pasar. Y de nada vale hacerse el listo fingiendo que se quiere algo que en realidad quieres evitar a toda costa. Lo mejor que se puede hacer es no pensar. Es una lástima que yo no lo consiga… A veces la vida no es justa. A veces parece que todo lo malo sucede a la vez. Pero con el paso de los días te das cuenta de que, para conseguir lo que realmente deseas, no tienes más que dejarte llevar... Porque el amor es así, solo llega cuando te olvidas de él...

jueves, 5 de abril de 2012

¡Oh Maga!

Llega un momento en qué no sabes cuándo acaba Octubre y dónde empieza Diciembre, y te has comido Noviembre lleno de sensaciones. No sabes hasta qué punto te encuentras (como si tuviésemos alguno) y te inventas trenzas por las que subir y saltar y llenos de pena están. Entonces pasas a un estado a otro, y sin conocer, saltas al vacío. Y borrachos de vida seguimos. Acuérdate de mí, de las miradas en los autobuses, de cómo empecé a leerme Rayuela ¡Oh, Maga! Hasta qué punto has creado magia.
Cuántas veces me habré sentido Oliveira, ¡Cuánta gente habrá gritado su nombre! Recorriendo los dedos por su pelo mientras que sus muslos se estremecían. Y entonces me olvido, no sin antes acordarme del río Bernesga. Aquel día, mirando al frente, te maldecía. Pero a estas alturas, dejo de ser Oliveira. Me pregunto si algún día me verás como... ¡Oh Maga!

Demasiado tarde, siempre, porque aunque hiciéramos tantas veces el amor la felicidad tenía que ser otra cosa, algo quizá más triste que esta paz y este placer, un aire como de unicornio o isla, una caída interminable en la inmovilidad.

Julio Cortázar

lunes, 2 de abril de 2012

Nos queríamos a morir o matábamos por querernos

Nunca tuvimos un término medio. Nos queríamos a morir o matábamos por querernos. Me hiciste cruzar la línea que un día vos mismo pintaste. Me hiciste saltar semáforos en rojo, sabiendo las consecuencias. Sin embargo, yo puedo ser los viernes por la noche, y vos los domingos por la mañana. Puedo quererte los días pares y vos a mí los impares. Voy a ser quien ponga las normas y vos quien se las salte. Yo puedo ser lo que quieras, vos ya fuiste lo que quería.